8 consejos para aquellos conductores que cogen una furgoneta por primera vez

8 consejos clave para los conductores que cogen una furgoneta por primera vez

¿Alguna vez has escuchado el lema de los niños exploradores: «estar preparado»? Bien, probablemente el señor Robert Baden-Powell nunca imaginó que sus famosas palabras serían adoptadas por un malvado villano en una película de los noventa de Disney, pero dejando a un lado a Scar y al Rey León, es un buen consejo cuando coges una furgoneta por primera vez.

Conducir una furgoneta puede ser bastante intimidante, con temores que van creciendo acorde con las dimensiones de la furgoneta, pero con la preparación adecuada, ponerte al volante de una furgoneta puede ser tan fácil como cantar Hakuna Matata, porque, ya sabes, significa «sin preocupaciones».

No puedo esperar a ser el rey (de la carretera)

¿Se te ha presentado la oportunidad de conducir una furgoneta por primera vez? Puede ser emocionante, sí. Pero también puede ser algo abrumador. Sin embargo, con nuestra ayuda, te vas a dar cuenta de que conducir una furgoneta es tan fácil como montar en bici. Con cuatro ruedas. Y un motor. Sea como sea, antes de que te subas al asiento del conductor y emprendas tu viaje para ser el rey o la reina de todos los conductores de furgonetas de aquí a Pride Rock, aquí están nuestros ocho consejos clave para un viaje seguro.

1. Está todo en regla, ¿sí? Asegúrate de responder sí a eso siempre

Antes siquiera de considerar conducir una furgoneta, asegúrate de que te está legalmente permitido hacerlo. Las licencias de conducción estándar te permiten conducir furgonetas hasta cierto peso y con un número específico de pasajeros a bordo. Comprueba tu licencia para asegurarte de que entra la furgoneta que quieres conducir, ya que las más grandes y pesadas requieren calificaciones adicionales antes de que puedas ponerte al volante. Y, mientras lo miras, asegúrate también de que estás plenamente asegurado.

2. Todos a la izquierda, todos a la derecha

Tan pronto como te pongas al volante de la furgoneta, te darás cuenta de que las cosas cambian. La ventaja es que estás más alto de lo normal, la posición del asiento es distinta ¿y qué pasa con la visión de la ventana trasera? Es verdad, nada, porque tienes una mampara bloqueando tu visión trasera. Tómate tu tiempo para familiarizarte con la furgoneta y con la visión que tienes cuando miras hacia fuera, tomando nota de dónde están los puntos ciegos.

3. Acomódate para el viaje

Una vez que tengas una idea de tu visión, es momento de colocar el asiento en una posición que te resulte cómoda. Mira si también puedes cambiar la posición del volante, moviéndolo hacia arriba y hacia abajo o adelante y atrás, de acuerdo con lo que te sea más cómodo. Acostúmbrate al lugar donde está situado el cambio de marchas, familiarízate con todos los controles que puedes o no necesitar. A lo mejor no es de noche o no está lloviendo cuando salgas, pero saber cómo encender las luces y el parabrisas por si cae la noche o se abre el cielo es una buena idea. ¿Cómo podría no serlo? Comprueba cómo encender los ventiladores tanto para el control como para el antiniebla y sé consciente de dónde están los controles de luces antiniebla y de emergencia.

4. ¿Será grande mi furgoneta?

El tamaño sí que importa cuando se trata de conducir una furgoneta. Deberías ser consciente del tamaño de tu furgoneta en lo que se refiere a la altura y la anchura. ¿Crees que se te puede olvidar? Escribe las medidas en un papel y pégalo en el salpicadero. Parecerás bastante guay cuando llegues a un puente bajo o te tengas que escurrir a través de una barrera pequeña, como la que te encontrarás en el aparcamiento. También es una buena idea ajustar los retrovisores para tener una buena visión de cada lado. Esto incluye ser capaz de ver parte de las ruedas, lo que significa que podrás detectar cualquier bolardo desagradable que sea más bajo que la altura de la cintura.

5. Todo el peso cuenta

Si conduces una furgoneta por primera vez, lo más probable es que la hayas alquilado para mudarte o para mover una gran cantidad de material. Si es así, tienes que ser listo a la hora de cargar la furgoneta. Pon las cosas más pesadas en el suelo y distribuye el peso de manera equitativa, ata y cubre las cosas tanto como sea necesario y asegúrate de que todo está tan seguro e inamovible como sea posible. Y, una vez emprendas el viaje, recuerda que con tu peso y el de todas las cosas la furgoneta va a pesar más. Esto afectará a la dirección y al frenado, así que conduce de acuerdo con ello.

6. Tómatelo con calma

A veces, en la conducción puedes tener la sensación de estar en medio de una estampida, ¿verdad? Así que, si tu vehículo es más grande de lo que estás acostumbrado, es importante que hagas las cosas lentamente. Tampoco te estamos diciendo que vayas a paso de tortuga, pero que no te dé miedo ser gentil con el pedal del gas, especialmente al principio. Nadie espera que las furgonetas circulen rápido de todos modos. ¿Será por eso que los repartidores tienen la fama de cogernos desprevenidos?

7. Conoce tus límites

Ahora bien, no queremos desalentar a nadie. Sueña en grande, nada es imposible… Pero ¿sabías que los límites de velocidad para las furgonetas son inferiores que para los coches? ¿Sí? Pensábamos que no. El límite nacional de velocidad para furgonetas en el Reino Unido es de 50 km/h en carreteras de sentido único y de 60 km/h en carreteras de doble sentido. En ambos casos, se trata de 10 km/h menos que el límite establecido para los coches. Agarrarte a esto te mantendrá a salvo y del lado de la ley.

8. Sé guay

Conducir de manera calmada y cortés significa que mantienes una elevada probabilidad de gozar de un viaje relajado y libre de accidentes. Sé paciente con los otros conductores y, probablemente, ellos lo serán contigo mientras te acostumbras a tu nueva bestia. Acércate a los giros y a los cruces con precaución, siempre indícalo con tiempo y sé el modelo de conductor de furgoneta guay, calmado y completo con el que todos soñamos.

Si sigues estos consejos, estarás preparado para todo.